Deep forest green

Are you going to Scarborough fair, parsley sage rosemary and thyme?
Remember me to the one who lives there, she once was a true love of mine.

domingo, 2 de enero de 2011

La chica del bus.

No hace mucho tiempo, tampoco es que sucediera ayer mismo, yo (Rosamary o Sage) tuve que volver a casa en autobus.
El recorrido era algo largo así que me senté, y tranquilamente sentada fui dejando pasar las paradas, una tras otra, viendo como la gente se subía y se bajaba hasta que el vehículo decidio estropearse y todos nos bajamos para entrar en otro autobús que afortunadamente estaba estacionado al lado.
Justo detrás de mi, una chica esperaba su turno para poder subirse.
Caray, que envidia... que bien le quedanesos pantalones.
Pero también,que gafas de sol tan bonitas. Combinaban bien con el color cereza apagado de sus labios.¿Pero qué...?
La blusa era de flores y la chaqueta deliciosamente combinadacon el pantalón.
Paga, y no se le ocurre otra cosa que sentarse delante de mi.justo delante. Lo suficientemente cerca como para que yo pueda pensar. Pensar en... en... joder! En lo buena que está!
Porque no m atrevo a mirar para inspeccionar su atuendo y cmprobar si hay algo que me guste. Si al rato ya no es eso... es ella. Que tiene un pelo negro rizo y lustroso. Y pecas, creo que pecas... y una figura envidiable, admirable. Deseable.
Y luego parece que uno lo tiene claro. Y si, claro. Pero la belleza, la belleza siempre nos anda traicionando.

Aguante las ganas terribles que tenía de no parar de mirarla, que me apetecía enamorarme de ella. Con las gafas de sol no podía saber si se percataba de mis vistazos furtivos. Aguaté y me bajé - por fin- en mi parada.
La fruta del paraíso giró en mi cabeza toda la tarde. ¡Y la de cosas en las que me dio que pensar la chica del bus!
Sin embargo, por la noche, volvía a soñar con él.

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